Iniciamos el segundo día del Festival Estéreo Picnic 2025 disfrutando de un mundo distinto, descubriendo en cada instante y en cada rincón del Simón Bolívar. ¡Así se siente estar vivos!

El Parque Simón Bolívar nos recibió con lluvia, un cielo gris y nubes en el firmamento, pero teníamos algo claro: nada ni nadie nos arruinaría el momento. De entrada, nos encontramos con Santi de Nassa Histoires, quien nos contó la emoción de presentarse en el FEP, los nuevos proyectos y todo lo que está por llegar para Nassa, pues son la cuota Tunjana Boyacense en el festival.

Las bandas emergentes se tomaron nuevamente el FEP, con todo el poder femenino a cargo de BadMilk y Lunalé, quienes deslumbraron a todos los asistentes con su talento y carisma.

Oh Laville, con todo su repertorio, impactó en el FEP a pesar del mal clima, conectando con el público y sus fans. Y es que el Festival Estéreo Picnic es el lugar donde se unen las culturas: asistentes de todos los rincones del planeta disfrutan de uno de los festivales más grandes de América Latina.

El chikirock estuvo a cargo de Kidchen, ¡estos chicos nos hicieron saltar, vibrar y disfrutar de principio a fin, descubriendo a esta chikiband!

Y seguimos con los grandes del FEP: The Hives, quienes, con todo su power y energía, dieron inicio a un gran show. La lluvia comenzó junto con ellos: tres canciones, todos saltando, coreando y disfrutando al compás de la lluvia. Sin embargo, la tormenta eléctrica obligó a los organizadores de Páramo a suspender el show por el bienestar de todos. Aproximadamente 20 minutos después, el show se reanudó, ¡y The Hives la rompió!

Una de las agrupaciones más esperadas sin duda fue Incubus, que, horas antes del show, tuvo que cancelar por problemas de salud. En su reemplazo, nombraron a 1280 Almas, quienes impactaron con su show y energía.

Parcels, que ya había deslumbrado a todos en el concierto de inauguración del festival, demostró por qué fueron los elegidos. Su energía, su show y conexión con los fans hicieron que el escenario Johnnie Walker se encendiera.

Otra de las bandas más esperadas por todos fue Tool, que realmente hizo que todo el parque se conectara con ellos. Personas de otros países venían a verlos y disfrutar de una noche increíble.

Y el sueño de muchos se cumplió con Justin Timberlake, quien, con su coreografía, bailarines y éxitos, nos puso a cantar y bailar. Los mejores temas de toda su carrera, y sus bailarinas también deslumbraron con su increíble voz. Las luces, animaciones y todo lo que se integró al show lo hicieron único e increíble. El escenario estuvo completamente lleno, y la conexión con el público fue inigualable.

El Parque Simón Bolívar siguió vibrando con la escena electrónica y urbana. El mal clima no pudo frenar ni detenernos a todo el equipo de Positiva ni a los miles de asistentes al Festival Estéreo Picnic.

¡Un mundo distinto! Y en cada instante comprobamos cómo se siente estar vivos.

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